El contentamiento no es la palabra de moda de la sociedad contemporánea. Los promotores sociales e internos nos están estimulando a participar en una carrera frenética para desear y adquirir más. ¿Qué es en realidad «más»? Pero apenas podemos resistir la presión. El resultado es una humanidad insatisfecha, frustrada y angustiada que persigue el «más» ilusorio. En el proceso, nuestra inclinación a servir y dar se paraliza seriamente.

La Biblia exhorta al creyente a aceptar el contentamiento (Filipenses 4: 11-13; 1 Timoteo 6: 6-12; 2 Corintios 12: 9-10; Romanos 8:28). Esto conlleva una postura mental diferente. El reconocimiento y el agradecimiento por lo que hemos recibido, el aprecio y el respeto por las bendiciones de los demás son los componentes de esta contracultura. Está acorde con las instrucciones que se encuentran en el décimo mandamiento: No codiciarás (Éxodo 20: 17). Entonces, ¿cómo cultivamos tal actitud hoy?

Este número del Mayordomo Dinámico [Dynamic Steward] explora el significado del contentamiento y su relevancia para la calidad de vida y la mayordomía fiel. También aborda la cuestión del contentamiento frente a la mejora de la vida.

Nuestro artículo sobre educación financiera aborda el tema de los intereses de las tarjetas de crédito. La sección titulada «Edificando su Iglesia» discute sobre la celebración de eventos de la vida. También estamos compartiendo tres experiencias con respecto a las prácticas de donación electrónica. ¿Es esta la nueva moda o una herramienta útil?

Disfrute de la lectura, experimente el contenido y el contentamiento, y no deje de compartirlo con otros.

Aniel Barbe 

Editor